Receta casera Mix Frutas, miel y Pimienta
Este helado no solo es delicioso, sino que también ofrece propiedades y beneficios :
Los tomates
Aportan un toque inesperado y vibrante. Son ricos en licopeno, un antioxidante que puede ayudar a proteger la piel del daño causado por los radicales libres.
La pera
Agrega dulzura natural y una textura suave al helado. Este fruto es una excelente fuente de fibra y vitaminas, beneficiando la salud digestiva y fortaleciendo el sistema inmunológico.
La pimienta roja
Agrega un toque picante y un estallido de color. Además de ser una fuente de vitamina C, la pimienta roja tiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
La acidez del limón
Equilibra la dulzura y aporta un toque refrescante. Los limones son conocidos por su alto contenido de vitamina C, que promueve la salud del sistema inmunológico.
La combinación de leche, yogur y nata
Crea una base cremosa y suave. Estos lácteos proporcionan calcio y proteínas esenciales para la salud ósea y muscular.
Propiedades y Beneficios:
Rico en Antioxidantes
Gracias a los tomates, pimienta roja y limón, este helado es una fuente significativa de antioxidantes que ayudan a combatir el estrés oxidativo en el cuerpo.
Apoyo a la Digestión:
La pera y los lácteos en la base del helado contienen fibra y probióticos que favorecen la salud digestiva y el equilibrio de la flora intestinal.
Fortalecimiento Inmunológico:
La combinación de frutas frescas y lácteos aporta una variedad de vitaminas, especialmente la vitamina C, que fortalece el sistema inmunológico.
Hidratación y Frescura:
La presencia de tomates y limón agrega un componente hidratante y refrescante, perfecto para combatir el calor y satisfacer los antojos veraniegos.
Ingredientes:
1/2 kg tomates maduros
1 pera madura sin piel, troceada.
1 cda de miel
1 pizca de sal
1 yogur griego natural sin azúcar
200 ml leche
200 ml nata para montar
1/2 pimienta roja mediana picada
Zumo 1/2 limón
Paso 1
Pon los tomates lavados en una olla, cocinar hasta que estén blandos. Retirar del fuego, pasárlos rápidamente por agua fría y luego pelar y cortar.
Paso 2
Cocinar a fuego lento revolviendo de vez en cuando hasta obtener una textura espesa.
Retirar la mezcla del fuego y dejar reposar unos 15 minutos.
Paso 3
Pasado este tiempo, en la licuadora verter la leche, el yogur y la mezcla de tomates.
Licuar para mezclar los ingredientes, colocar en un recipiente y congelar por 1 hora.
Paso 4
Pasado el tiempo 1 hora, sacar la mezcla del congelador. Verter en el bol de la batidora, añadir la nata y batir durante 3 minutos hasta que esté un consistencia suave y cremosa.
Poner en el recipiente y volver a congelar por 2 horas más.
¡Y listo! Disfruta de una experiencia refrescante y nutritiva con cada cucharada de este helado de tomates frescos.
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